martes, 16 de julio de 2013

Ardo

Sólo yo escribo mi camino.

Con los pies en las venas,
en el fluído oscuro que bombea
...y asciende por cada poro del que escapo.

Escapo y no pierdo,
que el fracaso es un invento de los que viven mirando a ambos lados de su ego,
de los que corren sin caminar
y cruzan meta sin saber ganar el premio de sus endorfinas
...por buscarle precio al placer de la nada,
por no saber una noche de arena.

Echo de menos tantas cosas que no recuerdo,
que no habría sendero de piedras con destino a su incerteza.
Hay tantos soles que aún no han nacido,
que arden mis dedos por pisar sus rayos.

Ardo en la calma fluída de un afluente hacia su techo de estrellas,
de la huída del cemento.
Dónde desnudo el alma en un escenario de ventanas abiertas,
dónde emerge la naturaleza humana

sin apéndices de asfalto en la mirada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario